El pasivado es un proceso que efectúa la eliminación química de la contaminación metálica de la superficie del acero inoxidable, producida en los procesos de manipulación y fabricación de las piezas y componentes (soldadura, mecanizado, estampado, corte, etc.) y la regeneración de su capa pasiva de una manera controlada y segura.
Realizamos el pasivado bajo las normativas internacionales más comunes o adaptándonos a las específicas de nuestros clientes: ASTM A967, ASTM A380, AMS 2700C, AMS QQ-P-35, UNE EN 2516.
El pasivado es un proceso imprescindible para asegurar que la capa pasiva de óxidos de cromo del acero inoxidable se genere correctamente y por lo tanto la resistencia a la corrosión sea la indicada para el tipo de aleación.
Aplicable en la industria química, farmacéutica, aeronáutica, aeroespacial, en alimentación, obra pública, mobiliario...
En nuestras instalaciones disponemos de todo lo necesario para asegurar la perfección del proceso y realizamos los ensayos necesarios (test ferroxyl, rugosidad, molibdeno,…) que aseguran la descontaminación, facilitando toda la documentación referente al pasivado, del proceso y resultado obtenido. Trabajamos con la normativa actual del pasivado ASTM G82-98 comprobando la capa pasiva a través de la medida de diferencia de potencial.
La mayor característica del acero inoxidable es su alta resistencia a la corrosión, siempre y cuando su superfície esté totalmente descontaminada. La principal fuente de contaminación del acero inoxidable es la contaminación ferrítica, de manera que las partículas metálicas depositadas en la superfície se pueden oxidar y acabar contaminando el acero inoxidable.
El pasivado del acero inoxidable puede realizarse de 2 modos:
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